viernes, 8 de julio de 2011

Atapuerca: un eslabón de hace un millón de años (I)

Hace un millón de años un grupo de homínidos se instaló en la Sierra de Atapuerca y en los alrededores de este cerro situado cerca del río Arlanzón.
En Atapuerca se encuentran buena parte de las claves de nuestro pasado y donde se han encontrado cerca del 85% del registro fósil mundial, por lo que se ha constituido en un yacimiento fundamental para entender la evolución humana. Después de 30 años de continuas excavaciones, el registro de estos yacimientos sigue siendo clave para conocer el origen del Homo sapiens, nuestra especie.

Homo Antecessor

Antecessor: ( del lat. antecedo ), el que va o marcha delante, el que guía o abre la marcha, conductor, maestro. Este nombre alude a la idea de que esta especie representa a los primeros homínidos que exploraron y colonizaron el continente europeo.


Atapuerca se localiza a 20 Km al norte de Burgos, en la sierra que lleva su nombre. Entre Rubena y Briviesca ( Km 253,5 ) se encuentra el cruce que nos lleva hacia Barrios de Colina y Atapuerca. No hay buena señalización, por lo que es preciso poner especial atención. La carretera además, es estrecha, para acabar por un camino de cantos y piedras, sin asfaltar, hasta llegar al Parque Arqueológico. La "aventura" que ahora empieza comenzó unos kilómetros antes de llegar aquí. 
Hay pocas indicaciones para llegar y el recorrido se realiza por estrechos caminos. Hay que estar muy atentos, porque parte del itinerario transcurre por el Camino de Santiago y nunca faltan peregrinos.


La visita se realiza sobre tres escenarios. el Parque Arqueológico, los Yacimientos, y el Museo de la Evolución Humana.

Parque Arqueológico
Se trata de un pequeño itinerario didáctico por la Prehistoria y trata de acercar a niños y mayores, a los modos de vida y las dificultades con que se encontraban los primeros humanos. El fin de este recorrido es conocer los cambios experimentados por el ser humano a lo largo del tiempo. Se localiza cerca del pueblo de Atapuerca.


Llegar hasta aquí forma parte de la gran aventura que nos espera
 Dentro de esta cabaña te enseñan a crear fuego con los útiles de la Prehistoria.

El Camino de Santiago a su paso por Atapuerca.
Cartel anunciador del Parque Arqueológico.
Al fondo, el pueblo de Atapuerca

Los Yacimientos
Para ver los Yacimientos, es necesario llegar al pueblo de Ibeas de Juarros Los yacimientos de Atapueca son Patrimonio de la Humanidad, por lo que la visita está restringida a los automóviles, y sólo se puede realizar en Bus.


Desde Ibeas sale el bus. Aquí se saca el billete. El Ayuntamiento está en frente
La construcción de un ferrocarril minero, a mediados del S. XIX, abrió una brecha en la Sierra de Atapuerca, una "Trinchera"  en forma de arco que cruza la sierra y propició la aparición de decenas de fósiles.





El recorrido por la Trinchera se realiza cuando no se está excavando. De junio a septiembre, la visita se realiza por un camino paralelo y se evitan molestias. 

Yacimiento Sima del Elefante

2 Sima del Elefante
3 Galería
4 Gran Dolina
Sima del Elefante, Galería y Gran Dolina son tres conductos kársticos colmatados hasta el techo, que la construcción del ferrocarril puso al descubierto. Esta construcción fue providencial para dar a conocer el secreto mejor guardado de la sierra.

Vista de la Sierra de Atapuerca
En una cata de prospección, Gran Dolina proporcionó en el nivel TD6 ( "Estrato Aurora" en homenaje a la arqueóloga Aurora Martín ) el diente de un humano,  finalizando la campaña con más de un centenar de restos de una nueva especie (homo antecessor). Estos hallazgos retrasaron la ocupación del continente europeo hasta los 800.000 años (la datación se realizó mediante paleomagnetismo). Los pocos restos que hasta entonces se conocían, provenían de yacimientos como L'Arago (Tautavel, Francia), Mauer (cerca de Heidelberg,  Alemania. Este yacimiento da nombre a la especie homo heidelbergensis, por ser el primer descubrimiento), Petralona (Grecia), Boxgrove y Swanscombe (Inglaterra). La datación de estos restos apenas superaba el medio millón de años.

Además de la visita guiada, hay paneles informativos durante el recorrido.

Museo de la Evolución Humana
Un museo único para los tesoros de Atapuerca, pero además, un museo único en el mundo, dedicado a una especie, la nuestra. Para llegar hasta nuestros días, fue necesario que varias especies fuesen evolucionando: el homo antecessor, el homo heidelbergensis, el homo neanderthalensis, y por último el homo sapiens.
Junto al museo se sitúa el nuevo Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana ( CENIEH ).


El MEH es obra del arquitecto Juan Navarro Baldeweg
El Museo de la Evolución Humana (MEH) es un centro de divulgación y de conocimiento científico. Se ubica en el centro de Burgos, cerca de la Catedral. No resulta fácil aparcar en las cercanías. Desde aquí parten las lanzaderas para visitar los yacimientos.
Nada más entrar nuestra atención se dirige hacia el gran espacio interior, diáfano, lleno de luz y transparencia. La visita, sin entrar en detalles, puede durar 2 ó 3 horas. Con cerca de 6.000 m2 y 4 plantas, la cantidad de restos y útiles de todo tipo se distribuyen de manera homogénea y didáctica. 
Por una rampa se accede a la planta -1, dedicado al espacio vital que pudo conocer el género homo. Atapuerca y su especial ecosistema, el hábitat  "natural" que conocieron aquellos seres y el lugar que habitaron largamente.


La Entrada al MEH 

En la planta 0 comienza nuestra evolución biológica. Darwin o Ramón y Cajal, también forma parte de este capítulo de nuestra Prehistoria. El Beagle y el funcionamiento del sistema nervioso se solapan hasta llegar a la espectacular puesta en escena de nuestros antepasados: la evolución de los homínidos a lo largo de 7 millones de años, a través de varias reproducciones realistas.
La planta 1 se dedica a la evolución cultural: el conocimiento del fuego, las herramientas y útiles, los inicios del lenguaje y del arte.
La última planta nos presenta los distintos ecosistemas que nos acompañaron hasta los inicios del Neolítico. Y como todo buen museo, va satisfaciendo nuestra curiosidad, pero también nos llena de dudas y de preguntas, que al día de hoy todavía esperan respuesta.

El MEH se ha constituido en el espejo de lo encontrado en Atapuerca, pero la imagen que nos devuelve, todavía distorsionada, nos permite contemplar con mayor precisión, como fuimos y nos acerca un poco más a nuestros orígenes.


Línea Evolutiva

Lecturas interesantes:

- La especie elegida. J.L. Arsuaga. I. Martinez. Ed. Planeta "Temas de Hoy". Madrid, 2010
- Arqueología de campo. M. Wheeler. Ed. Fondo de Cultura Económica.
- Prehistoria. M.H. Alimen. M.J. Steve. Ed. Siglo XXI. Madrid, 1977. 


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